
Caminando por Paseo Ahumada, sonaba Ella en mis oídos, sólo en los míos. Me divertía imaginando que el gentío se movía al compás del jazz, como en un musical. Iba distraída, no había reparado en la hora, hasta que lo vi. Me estaba esperando, se puso frente de mí de manera que no pude avanzar más y me...